Entradas populares

Vistas de página en total

miércoles, 11 de junio de 2014

Estreno

Actuar, hablar, mostrarse en público siempre produce nerviosismo. En realidad nos educaron en la inhibición, el recato, el pudor  y un elevado sentido del ridículo. La mayoría de las veces evitamos situaciones donde podamos sentirnos en evidencia. Pasar desapercibidos, que nadie repare en tus actos. Es fácil pasar la vida siendo un ente gris y monótono, pero un día decides poner color y música a tu vida. Y te subes a un escenario a cantar, a bailar, a tocar el piano ... Y las mariposas en la tripa muerden y las ganas de huir se disparan. Luego sale todo bien y el aplauso reconforta, emociona e incluso envicia.
Hoy me estreno como pianista.
Arriba el telón!

sábado, 31 de mayo de 2014

Dulce

Me gustan la comida dulce, la gente dulce y las cosas dulces de la vida. Un helado en una tarde de verano, un bombón de regalo en la mesa del trabajo, una piruleta que te tiñe la lengua, las fresas con nata que llegan con la primavera, el caramelo de toffee que se pega a los dientes, los ositos de gominola que crean adicción,  todo eso son momentos que endulzan la vida y hacen sacar una sonrisa en la cara.
Hay gente que dice ser más de salado, otra disfruta con la acidez y otros con las cosas agrias.
No sé si la comida afecta al carácter pero a pesar de su mala fama, el azúcar es necesaria para el cerebro y para los músculos. Y la dulzura es necesaria para superar malos momentos  y los sinsabores de la vida y sobrevivir al día a día y a la sosa rutina.

miércoles, 28 de mayo de 2014

Lluvia

Siempre he envidiado a la gente que disfruta en los días de lluvia. Yo no los soporto, y eso que me esfuerzo. Salgo con mi mejor sonrisa, con un paraguas precioso de mi colección, pero en el primer charco me pongo de mal humor. Te mojas el pantalón, o pasa un coche y te jaspea de barro hasta las cejas. Cruzas el paso de cebra patinando peligrosamente. El autobús llega tarde, lleno y cuando se acerca a la marquesina te arroja un chorrito de agua por un fino canalón que le recorre longitudinalmente. Te moja la cara justo ahora que habías conseguido cerrar el paraguas. Comienza el baile: sacar el billete de la cartera sin que el paraguas moje a nadie. No suele haber sitio para sentarse, y si lo hay es imposible colocar el paraguas sin que empape una pierna; no siempre, quizás alguna vez encuentres la postura pero entonces te olvidarás el paraguas en el bus y sera tu preferido, asúmelo. Y luego el atasco, porque es de todos conocidos que la lluvia al tocar la carrocería de los coches les ralentiza hasta los 20 km por hora, aunque estés en una autopista.
Y las conversaciones, la final de la Champions League o las Elecciones del domingo pasan a un segundo plano porque todos tenemos que opinar sobre la cantidad de agua caída: cuatro gotas, chaparrón, borrasca o tifón chino. Y no pueden faltar los tópicos de "yo acabo de tender la ropa", "ayer fui a la peluqueria' o "siempre llueve los viernes". Consigues llegar a destino y comienza el mercadillo: todos los paraguas abiertos en el descansillo de los ascensores desafiando a la mala suerte.
Durante toda la jornada de encierro laboral lucirá el sol y justo a la hora de volver a casa se repetirá la operación paraguas. Pero recibirás, eso sí, mil mensajes del tipo: sonríe, canta, baila... Aunque en realidad quienes los remiten lleven un día de perros igual o superior al tuyo.
Nunca llueve a gusto de todos.

jueves, 22 de mayo de 2014

Niñez

Me sorprende la gente que recuerda su niñez nítidamente como si no hubiese pasado el tiempo, como si siguiesen tomando aspirina infantil y tuviesen costras en las rodillas. Te hablan de sus profesores de E.G.B. con nombres, estilo de ropa y olor a agua de colonia Heno de Pravia. Recuerdan los apellidos de sus compañeros por orden alfabético, sus regalos de Reyes y la comida que les obligaban a comer contra su voluntad.
Son personas que se sientan cada jueves año tras año a ver "Cuéntame", que adoran esos mensajes en cadena  que nos enseñan los peligrosa que era la vida y como hemos sobrevivido a bacterias, golpes, desconocidos o novatadas. Los que buscan a sus compañeros de pupitre, incluidos matón de instituto o empollón insufrible, por las redes sociales , creando eventos para reencuentros casposos con música de Karina y Tequila.
A veces me hacen sentir que no tuve infancia, o que no fui feliz, o que no tengo memoria. Simplemente, no creo que el tiempo pasado fuese mejor.

martes, 20 de mayo de 2014

Volver

Siempre quiero volver... Pero no encuentro tiempo.
Quiero hacer tanto que a veces me paraliza y no sé hacia donde seguir...
¿Perfecciono lo que se me da medio bien o inicio nuevas tareas?
Lo quiero hacer todo y efectivamente todo no se puede...pero yo lo intento cada día, cada lunes, cada primero de mes.
Hoy no es día 1 ni lunes ni acabo de levantarme y he decido volver a este blog intermitente, casi agónico, pero que sobrevive como la que escribe.

martes, 12 de noviembre de 2013

Serendipia




Siempre me ha gustado conocer gente nueva, disfruto con el saludo inicial, esas primeras conversaciones, saber las aficiones del otro, si coincides o no en gustos y hobbies y aprender y admirar de sus conocimientos y habilidades. A veces, convives con gente con la que no conectas y compartes tu tiempo durante años sin saber qué le apasiona o a qué dedica el tiempo libre y sin admirarles en nada especialmente. Sin embargo, otras personas desprenden una chispa de electricidad que te espabila rápidamente y que indica que hay mucha energía en el ambiente. Entonces las frases, los temas, la curiosidad y la admiración comienzan a fluir y se activa la serotonina en el cerebro.

Afortunadamente eso me ha ocurrido muchas veces en mi vida, yo lo llamo magia. Pero especialmente en las últimas semanas hay situaciones nuevas, personas nuevas, nuevas perspectivas que me hacen sonreír y pensar en que existen las casualidades.  ¿Serendipia? 

Mis recomendaciones
serie... Breaking Bad
música....BSO La Misión
peli "De óxido y hueso"

libro "La verdad sobre el caso Harry Quebert"

sábado, 18 de mayo de 2013

Ayuda

Siempre había querido hacer lo que hago ahora: ayudar. Y la ayuda es como rascar... sólo empiezas y no paras. Dejas de pensar en tí, en tu tiempo, en tus manías y te llena de energía, te quita la pereza y te recarga las baterías. Compartes los problemas y se arreglan los tuyos, o al menos toman la dimensión verdadera, no son tan grandes como pensabas. Y aprendes a valorar tu tiempo. tu espacio, tus circunstancias y tu suerte. 
Si ayudas a inmigrantes sin recursos o sin formación, valoras no haber tenido que salir de tu casa y haber tenido un colegio, una sanidad y una familia volcada en tu bienestar. Si ayudas a mujeres víctimas, o solas, las admiras por su valor. Si ayudas a enfermos, aprendes que la salud es lo más preciado y que no nos podemos quejar por cosas menores, el acceso a la sanidad es prioritario... el resto se puede posponer, se puede negociar o se puede comprar. 
Por eso, en los tiempos que nos toca vivir es necesario que todos ayudemos, cada uno en su medida y no hace falta ser un santo ni un héroe. Todos en nuestro entorno podemos hacer la vida más fácil a los demás.
En primer lugar, con una sonrisa y buen humor, recuperar las palabras "por favor"  y "gracias". Después, con pequeñas cosas que no cuestan nada como guardar tapones de botella, donar la ropa y los juguetes en buen estado, y en el mejor de los casos, participando activamente en alguna de tantas asociaciones locales que valoran el tiempo y el esfuerzo de los voluntarios para crear un tejido social nuevo. Algunas cosas valen mucho más que dinero. 
Y no hay excusas...hay todo tipo de asociaciones que necesitan ayuda: enfermos, hospitales, prevención mujeres, inmigrantes, menores, ancianos, jóvenes, vecinos, alimentos, tercer mundo, animales, medioambiente, ...
Todos valemos para ayudar, igual que todos merecemos que nos ayuden ... no lo pienses más y acude a alguna asociación. Te sentirás mejor ...y te ayudarás a tí mismo.

SUGERENCIAS...
Peli: La vida de Pi... preciosa !!
Libro: Sin noticias de Gurb...de vez en cuando hay q releer y reir a carcajadas.
Música: Cecilia Inédita, siempre emociona
Serie: Cooper, un poli en el NY de los pioneros.
Web: http://www.uolala.com